En la actualidad, con el uso de empaques retornables ponemos en movimiento un circuito productivo y económico que permite sumar un granito de arena en favor de la sostenibilidad del planeta.
¿Qué es un empaque sostenible? Es aquel que se ha concebido desde su origen de manera responsable, diseñado para ser eficaz y seguro en todo su ciclo de vida, cumpliendo los criterios de mercado para su rendimiento y coste, manufacturando en lo posible con energías renovables y/o materiales reciclados, y que una vez utilizado, inicia el ciclo del reciclaje para evitar lo más posible uso de nuevos recursos naturales para su elaboración.
Hoy en día algunos plásticos pueden ser usados en diferentes formas de empaques retornables: bolsas, botellas, vasos y bandejas termoformadas y cajas con soporte de cartón. Estos empaques normalmente están constituidos por coextrusiones y/o laminaciones que pueden soportar temperaturas hasta de 135ºC (posibilidad de pasteurizar y esterilizar productos) hasta por 90 minutos.
Beneficios de ser retornables
El principal beneficio es el que le hacemos al planeta, con el reutilizar un recipiente ayudamos a que pueda usarse varias veces hasta que su vida útil así lo permita. Esto minimiza el uso de nuevos recursos naturales.
¿Por qué es importante el uso de empaques retornables?
Nuestro planeta es finito, posee límites de sostenibilidad que disminuyen a medida que crece la población. Esta es una verdad absoluta que no debemos olvidar. Posiblemente no seamos ahora nosotros las víctimas de llevar al planeta al límite, pero nuestras próximas generaciones si estarán más cerca de ese momento irreversible. Debemos entonces dejar de ser tan egoístas y pensar en lo grandioso de la vida y de mantenerla así por el mayor tiempo posible. Nuestra posición como el ser viviente de la tierra más inteligente e influyente debe hacernos más responsables con el resto de los seres vivos del planeta que tienen los mismos derechos que nosotros de vivir y evolucionar.
El reciclaje es una acción inteligente que demuestra que estamos pasando a un mayor nivel de conciencia, eso es evolución positiva, generosa con la naturaleza y responsable con el futuro. Reciclar, reusar, clasificar, optimizar son todos verbos que implican trabajo, un orden y una convicción mental que debemos responsablemente asumir para garantizar la sostenibilidad del planeta. Tan simple pero contundente es este tema.
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